En muchas más ocasiones de las que me gustaría escucho a muchas personas expresar, con tristeza, el verbo aguantar.
Pero, ¿qué significa realmente aguantar?
Según la RAE, aguantar significa ”sostener o sustentar, reprimir o contener, resistir pesos, impulsos y trabajos”.
Y es que perdemos unos tiempos preciosos en la vida resignados a mantener situaciones y relaciones que no nos convienen, que nos generan un alto grado de estrés y como consecuencia afectan nuestra salud, no solo física sino también mental.
¿Por qué tienes que aguantar a tu jefe?
¿Qué te hace resistir la mala energía de otra persona?
¿Qué te hace pensar que debes cargar tu sol@ con esa pesada “mochila de vida”?
Que lo hayas hecho hasta hoy no significa que debas seguir haciéndolo.
Después de todo lo que hemos vivido, en mi trabajo como mentora de empresarias en crecimiento, he notado que muchas personas son más conscientes del valor de las experiencias continuas y agradables, y que no es necesario postergar el disfrute para cuando se cumplan ciertas condiciones.
¿Y si dejamos de aguantar para disfrutar?
Para mí lo contrario de “aguantar” es “disfrutar”, que según la RAE significa: “Gozar, sentir placer o comodidad, tener buena condición física o mental” y debemos comprender que postergar ese gozo hace que el camino en la vida se nos haga mas pesado.
Por eso te propongo que cada día disfrutes de alguna cosa, pequeña o grande. De ese placer que te puede dar una caminata, unos minutos más en la cama, un alimento o simplemente estar a solas contigo mismo. También te animo a que planifiques cada mes un actividad de esas que tenemos pensadas para “algún dia” porque ese “algún día” puede ser hoy.
Para eso, inclúyelo en tu agenda, piensa la cantidad de tiempo y los recursos que necesitas, con quien puedes hacerla y ponte en marcha. ¿Te animas?